"Fugaz y cotidiano", dice Fernando Savater. El oficio de escribir requiere humildad y responsabilidad; uno puede dirigirse a unos pocos o a la mayoría, pero escribir impone pensar en otros, en los demás. Quien escribe, sabe que sus textos podrán cumplir una función didáctica o lúdica pero siempre social; trate de lo que trate, un artículo “siempre cumple una función política, es decir, se debe a la polis y a las obligaciones de nuestra comunidad”. Aunque no es su objetivo reflexionar sobre el periodismo, en Figuraciones mías (Sobre el gozo de leer y el riesgo de pensar) hay una reunión de ideas sobre el compromiso con la verdad y la honradez al ejercer la escritura desde las páginas de la prensa tradicional o los espacios virtuales, donde, por cierto, Savater encuentra uno de los defectos que el texto periodístico no debería permitirse: la irresponsabilidad del anonimato: “El famoso rostro blanco de V fue, en la historia original de Alan Moore, un subterfugio para combatir la...